Hipertensión arterial: una amenaza silenciosa

Hipertensión arterial: una amenaza silenciosa

Autores: 
Diego Añazco, Daniel Bolaños, Pablo Castro, Sisa Chimborazo, Carlos Dier, Jorge Espinoza, Steven Guzman, Iqrah Muhammad, Tatiana Pullas, Daniela Sosa, Susan Zarate.
Escuela de Medicina Humana - Universidad San Francisco de Quito.

¿Qué es la HTA y qué tan común puede llegar a ser?

Alrededor de 7.6 millones de muertes anuales se asocian a hipertensión arterial. Actualmente, se calcula que un 26% de la población mundial (972 millones) padece de la misma y se estima que para el 2025 aumentará en un 3%, razón por la cual hoy es considerada uno de los principales problemas de salud en el mundo.

Ocasionando cerca del 19% del total de muertes en el Ecuador (5ta causa de muerte en el 2015), se entiende como hipertensión arterial al aumento de la presión por encima de 130/80 mmHg2. En sus etapas iniciales, esta no suele ocasionar molestias en las personas que la padecen. Es así que, a diferencia de otras enfermedades, los síntomas aparecen generalmente cuando existe ya un daño orgánico irreversible. Si no es manejada oportunamente puede desencadenar complicaciones severas como infartos cardíacos, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal, que pueden terminar en muerte.

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La medición y monitorización de la presión es el único método que permite el diagnóstico. Los valores obtenidos en varias tomas se clasifican en base a la siguiente tabla: 
  • Presión arterial normal: < 120 / < 80 mmHg 
  • Presión arterial elevada: 120-129/ <80 mmHg 
  • Hipertensión: Estadio 1; 130-139 / 80-89 mmHg. Estadio 2; >140 / >90 mmHg
Durante la medición de la presión arterial es importante que los pacientes verifiquen que el procedimiento se está realizando bajo las condiciones presentadas a continuación para así obtener resultados confiables:
  1. Se debe descansar 5 minutos antes de la medición. No debe haber tomado café o fumado 30 minutos antes de la misma. 
  2. Debe descubrirse completamente el brazo que se le indique; arremangar no es suficiente. Al sentarse en la silla asignada debe apoyarse correctamente en el espaldar, sin cruzar las piernas y con los pies asentados sobre el suelo.
  3. El brazo que va a ser utilizado debe reposar en cualquier superficie que permita que el brazalete se encuentre al mismo nivel del corazón.
  4. Mientras se realiza la medición el paciente no debe hablar o moverse.
¿Cómo puede presentarse la enfermad?

Como se ha mencionado previamente, la hipertensión arterial generalmente no resulta en signos ni síntomas. Sin embargo, las siguientes manifestaciones podrían presentarse inicialmente en la enfermedad:
  • Náuseas o vómitos
  • Dolor de cabeza
  • Dolor en el pecho
  • Sensación de mareo
  • Dificultad para respirar
  • Palpitaciones
  • Sangrado nasal
  • Cansancio
  • Presencia de manchas de sangre en los ojos
  • Trastornos visuales
  • Hinchazón de las piernas

¿A qué otras condiciones se asocia la HTA?

Existen varios factores de riesgo que pueden ser modificados para prevenir la hipertensión, incluyendo el sedentarismo, tabaquismo, sobrepeso, ingesta excesiva de sal y consumo de alcohol. La estratificación del riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular permite dar un tratamiento individualizado, ya sea farmacológico o mediante modificaciones en el estilo de vida.  La clasificación de los pacientes se realiza mediante calculadoras de riesgo que toman en cuenta parámetros determinantes como la edad, antecedentes familiares de hipertensión, comorbilidades asociadas, entre otros, y permite conocer el riesgo en 10 años de desarrollar complicaciones cardiovasculares. La dislipidemia, diabetes e insuficiencia renal crónica suelen están relacionadas con la hipertensión y representan un mal pronóstico. Conocer el riesgo cardiovascular permite realizar intervenciones apropiadas y oportunas para evitar la lesión de otros órganos como el cerebro, corazón, retina, y riñones.

Recomendaciones para prevención y manejo de HTA

Existen varias estrategias no farmacológicas que permiten prevenir el desarrollo de hipertensión, o ayudan a reducir los niveles de presión arterial en caso de que la enfermedad ya se encuentre presente. Entre las intervenciones con beneficios demostrados se encuentran:

Pérdida de peso: En caso de sobrepeso u obesidad, bajar de peso es beneficioso en el control de la presión arterial y en la prevención de otras enfermedades crónicas.

Dieta saludable: La dieta DASH (por sus siglas en inglés: Dietary Approaches to Stop Hypertension) ha sido la más estudiada en el manejo de HTA. El plan dietario es flexible y puede ser individualizado. Los objetivos principales son incrementar el consumo de frutas, vegetales y granos integrales, consumir preferentemente lácteos descremados, y disminuir alimentos ricos en grasas saturadas (carnes o lácteos con grasa y aceite de palma) y el consumo de azucares refinados (dulces y gaseosas). Un ejemplo de plan de dieta DASH se encuentra a continuación:
  • Granos integrales (6 a 8 porciones diarias) 
  • Frutas y vegetales (8 a 10 porciones diarias) 
  • Carnes (menos de 6 porciones diarias) 
  • Lácteos descremados (2 a 3 porciones diarias) 
  • Grasas y aceites (2 a 3 porciones diarias) 
  • Frutos secos (4 a 5 porciones semanales) 
  •  Dulces (menos de 5 a la semana)
Disminuir ingesta de sodio: Esto se puede lograr disminuyendo el consumo de alimentos procesados y cocinando con menos sal.

Incrementar ingesta de potasio: Entre los alimentos ricos en potasio se encuentran varias frutas, vegetales, frutos secos y granos (bananas, naranjas, espinaca, tomate, lentejas, frijoles, entre otros).

Realizar actividad física: Se recomienda realizar de 90 a 150 minutos de actividad física aeróbica a la semana. Evitar el consumo de tabaco y en caso de consumir alcohol, se recomienda restringir su consumo a 1 bebida diaria en mujeres, mientras que en hombres se recomiendan menos de 2 bebidas. Por cada bebida se entiende aproximadamente 12 oz de cerveza, 5 oz de vino o 1,5 oz de un alcohol destilado

Sin embargo, el tratamiento farmacológico es esencial en el manejo de esta enfermedad para disminuir el riesgo de desarrollar complicaciones. Existen diversas familias de fármacos que pueden emplearse para abordar los niveles altos de presión arterial (antihipertensivos), y la elección del medicamento ideal se realizará basándose en las necesidades individuales de cada paciente, que pueden modificarse por diversos factores, que incluyen comorbilidades o factores como la edad y el riesgo cardiovascular. Se requiere un seguimiento continuo para monitorear la respuesta a las intervenciones farmacológicas y no farmacológicas implementadas, y evaluar periódicamente posibles daños a diferentes órganos que podrían afectarse como resultado de presiones elevadas, incluyendo ojos, riñones, corazón, cerebro y vasos. 

La prevención y el tratamiento de la hipertensión y sus complicaciones conforman uno de los grandes desafíos en la salud pública actualmente a nivel mundial, y la situación de Ecuador no es distinta. Sin embargo, existen intervenciones en el estilo de vida que pueden ayudar a prevenir la enfermedad, o a reducir sus efectos perjudiciales para la salud. El control periódico de la presión arterial y su manejo adecuado es necesario para la prevención de posibles complicaciones. 

 Bibliografía:
1.    Kearney, P., Whelton, M., Reynolds, K., Muntner, P., Whelton, P & He, J. Global burden of hypertension: analysis of worldwide data. Lancet 365, 217-223 (2005)
2.    Rosero, G. Grado de hipertensión arterial y factores de riesgo cardiovascular asociados en pacientes hipertensos que acuden a consulta externa del hospital Delfina Torres de Concha de Esmeraldas en el periodo de enero-febrero del 2018 (2018)
3.    European Society of Cardiology. ESC/ESH Guidelines for management of arterial hypertension. European Heart Journal 39, 3021-3104 (2018).
4.    Brewster, L.M., van Montfrans, G.A. & Seedat, Y.k. The evidence on the 2018 ESC/ESH Guidelines for the management of arterial hypertension in African ancestry patients. Journal of hypertension 37, 650-651 (2019).
5.    Williams, B., Mancia, G., Spiering, W., Rosei, E. A., Azizi, M., Burnier, M., . . . Desormais, I. 2018 Practice guidelines for the management of arterial hypertension of the European Society of Cardiology and the European Society of Hypertension. Blood Pressure, 27(6), 314-340 (2018)
6.    James, G.D., & Gerber, L.M. Measuring arterial blood pressure in humans: Auscultatory and automatic measurement techniques for human biological field studides. American Journal of Human Biology 30 (2018).
7.    Whelton PK, Carey RM, Aronow WS, Casey DE Jr, Collins KJ,Dennison Himmelfarb C, DePalma SM, Gidding S, Jamerson KA, Jones DW, MacLaughlin EJ, Muntner P, Ovbiagele B, Smith SC Jr, Spencer CC, Stafford, RS, Taler SJ, Thomas RJ, Williams KA Sr, Williamson JD & Wright JT Jr. 2017 ACC/AHA/AAPA/ABC/ACPM/AGS/APhA/ASH/ASPC/NMA/PCNA guideline for the prevention, detection, evaluation, and management of high blood pressure in adults: a report of the American College of Cardiology/American Heart Association Task Force on Clinical Practice Guidelines.   J Am Coll Cardiol 71, 127-248 (2018).
8.    Steinberg, D., Bennet G., & Svetkey, L. The DASH Diet, 20 years later. JAMA 317, 1529-1530 (2017)


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